Una vez alguien me preguntó si no me sabía mal no tener el físico de una
modelo, ni haberlo tenido nunca, (y a estas alturas, ya, ¡no voy a tenerlo
nunca!). Si no sentía que me había perdido algo en la vida por no tener el
físico de una modelo... (No lo sé seguro, pero sospecho que esta persona ve un
poco demasiado la tele... Pero, vamos la tema).
A mí siempre me ha sabido más mal no haber escrito nunca todavía como una
escritora clásica, no no tener el físico de una modelo, qué queréis que os
diga, (¡y, con mi sobrepeso, además!). Pero me parece que esto, como en tantas otras
cosas, también tengo una opinión minoritaria...
No hay comentarios:
Publicar un comentario