En todo caso, años después, estoy ante el ordenador haciendo vida mental.
(El concepto de vida virtual, tal y como lo entendemos ahora, no existía).
Una vida de recogimiento está muy bien, sobre todo para las personas que no
somos demasiado sociables, pero tiene algunas carencias inevitables de las que
soy plenamente consciente.
Sobre todo la carencia de poder hablar cara a cara... porqué, ahora, ¿quién
se para a charlar, a pasear? Poca gente. Algunos todavía sí, pero...
* * *
Y aquella persona que se hubiera “lanzado a los ordenadores” como última
cosa desesperada a hacer en caso de absoluta necesidad, no me consta si ya
tiene su (...) y ya ha sido tragado. En todo caso, seguro que nos hubiéramos
hecho amigos de (...), si yo tuviera, y continuaríamos sin vernos,
cordialmente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario