Sobre esto de leer best-sellers para preparar viajes, también está lo de
las rutas turísticas con los lugares unidos bajo un epígrafe concreto sacado de
alguna obra novelesca que ha tenido mucho éxito, como por ejemplo la ruta por
los castillos de los cátaros que se puso de moda hace tiempo, basada en unos
best-sellers muy famosos; o la ruta por los lugares de la capital catalana
donde transcurre la novela La sombra del viento; o las visitas a las
casas o las tumbas de algunos escritores.
Pero esto ya no es leer el libro para preparar superficialmente el viaje,
sino que es haber leído el libro, o al escritor, haberte gustado, y querer
continuar la historia yendo a los lugares donde este/a respiró, para sentirte
más cerca de él.
Es una especie de fetichismo, ya lo sé, y muchas veces aquello que habíamos
leído es solamente una excusa para ver mundo, porqué donde realmente se
encuentra a un escritor es en sus obras; el lugar donde este respiró puede ser
que ahora no tenga nada que ver con como eran las cosas en el tiempo en qué
vivió allí tal escritor o donde está ambientada tal novela. Aquí ya es poner a
trabajar la imaginación de cada cual.
Tampoco he entendido nunca esta idea de ir a las tumbas de los escritores,
pero en fin, hay quien encuentra en ellas inspiración y comunión con la persona
que ha escrito aquello que tanto le ha gustado.
* * *
Supongo que si tuviera que hacer algún tipo de turismo – si no hubiera más
remedio- el que más me gustaría sería este relacionado con los viajes que
tengan que ver con algún libro o alguna ruta literaria, o en ir a librerias.
Aunque, ya digo, pienso que un autor se encuentra en sus obras y que los mundos
novelescos – sobre todo los de los best-sellers -, no suelen aguantarse fuera
de las novelas; todo ello sería solamente una excusa para ver mundo. (Que no
está nada mal, correr mundo... Pero no sería precisamente lo mío...).
No hay comentarios:
Publicar un comentario