domingo, 26 de junio de 2011

Juzgar a los demás desde la tarima

Las veces que he intentado suicidarme, cuando me tomé las pastillas y cuando me tiré al tren, me he oído decir de todo por parte de los médicos y personal hospitalario que me han atendido: algunas veces representaba que yo no debía oírlo, pero otras me lo han dicho a la cara directamente. Burra, imbécil, estúpida, subnormal, eso no se hace... Parece que cuando intentas suicidarte y no te sales con la tuya y además esto te deja secuelas lo único que se le ocurre a la gente normal que no te conoce y “que jamás lo haría” es que eres estúpida... Nunca jamás nadie se sentó a mi lado a decirme: “Debes estar sufriendo mucho que hayas hecho esto, ¿no?” Nadie ha visto el sufrimiento ni lo ha comprendido. Sólo han visto el hecho, y, como que ellos con la vida que tienen no lo harían ni entienden que alguien lo haga, se creen con el derecho a pensar que soy estúpida.

A mí sólo me gustaría decirles algo, a todos estos medicuchos y infermeruchos tan sabios: si hubieran sufrido ni tan sólo la mitad de lo que yo he sufrido, no solamente me darían la razón, sino que se hubieran tirado ellos conmigo, o como mínimo me hubieran empujado ellos mismos. ¿Qué sabrán ellos?

No hay comentarios: