viernes, 24 de junio de 2011

Autenticidad seductora

Se me ocurre que quizá hay alguien interesado en saber qué tipo de personas me gustan. No es muy complicado: me gusta la gente auténtica, que es sincera (como mínimo consigo misma, sé que serlo con los demás a veces es complicado, sin que eso quiera decir que se les engaña) y que tiene claro lo que le gusta. Me he fijado en que a veces en el pasado he hablado con personas que, casualmente, tenían los mismos gustos que yo, pero porqué yo los tenía, no porqué a estas personas estos gustos les salieran de dentro. Este tipo de gente que si a tu te gusta la literatura a ellos más, si a tu te gusta el fútbol te hacen un master en Guardiola y si les dices que te gusta el macramé resulta que lo han practicado desde siempre. Claro que me gusta hablar con gente que tenga los mismos gustos y visión de la vida que yo, pero que esto sea auténtico, no que lo digan porqué saben que a mí me gustará oírlo. Prefiero hablar con alguien con quien no tenga nada en común y que me explique lo que piensa realmente que no hablar con alguien que me de la razón en todo pero que eso no se parezca en nada a su verdad. Alguien que tenga claro qué le gusta en esta vida, no alguien que espere a ver qué me gusta a mí para decir que también tiene afición por ello. A mí me gusta conocer a las personas tal y como son de verdad, no su máscara para gustarme. Y os aseguro una cosa: encontrar autenticidad en algunas personas a veces es más difícil que buscar petróleo, por ello cuando tarde o temprano la verdad sale a relucir –y los gustos auténticos siempre salen a relucir- los hay que han tenido tantos disgustos...

No hay comentarios: