sábado, 26 de febrero de 2011

Baño y masaje

Parece que si ya no soy anónima tendré que mirar de quedar bien... ¿Os acordáis de un día en qué dije que a Jordi Basté le faltaba cultura para conducir un programa como el que conduce? Bien, pues lo he escuchado más detenidamente y es cierto que él tiene sus limitaciones, pero los invitados que tiene en el programa (no tengo razones para pensar que no los haya escogido él), pues estos invitados complementan muy bien sus lagunas. Cuando él dice algo de lo que no sabe mucho o en lo que no ha reflexionado lo suficiente –cosa que ocurre a menudo- siempre está ahí el invitado que le pone en su sitio y dice lo que debe decirse desde la perspectiva de alguien que sabe de qué va la cosa. Que se deje poner en su sitio por personas que saben más que él tiene mucho mérito, otro aprovecharía que dirige el programa para tener siempre razón y para invitar a personas que le diesen la razón. Entonces quizá sí que faltaría cultura, en el programa, pero mientras invite a persona que saben más que él, esta carencia no es un defecto, y Basté adopta muy acertadamente el papel de niño curiosos que pregunta y que tan bien le va. O sea que de acuerdo, la cultura de Basté tiene sus limitaciones, pero con las personas que invita a su programa las sabe limar muy bien, estas limitaciones.

Otra cosa son las ganas que tiene de presentar el programa. En la radio, cuando alguien hace un programa sin ganas, se nota enseguida; lo que pasa es que normalmente todos los que salen por la radio matarían por salir por la radio, y como que casi todos los programas se hacen con entusiasmo no parece que el entusiasmo a la hora de hacer un programa sea una característica destacable porqué se da por hecha. Pues bien, cuando Basté coge el micrófono la radio vibra. Tiene muchísimas ganas de hablar y salir por la radio, y eso transmite alegría y buen rollo y hace que su programa tenga un ritmo que hace buen escuchar.

Es decir que dije que a Basté le faltaba cultura para dirigir un programa como el que dirige... y quizá es así, pero se lo sabe suplir muy bien. Tenía razón la comentarista que me dijo que era un gran comunicador. Quizá no sea un gran sabio, pero es un gran comunicador.

Por cierto... un día dijeron que Basté escucha los programas deportivos de ona fm por la tarde cuando no trabaja. ¡Basté! ¡Recorcholis! ¿Qué es esto de estar escuchando programas deportivos? ¡Por las tardes deberías estar leyendo los clásicos grecolatinos!

No hay comentarios: