Puede ser que te hayan dicho tantas veces que estás gorda, que pesas demasiado, que eres insaciable, que “te mueves por la barriga”, que eres "Guillermito y su voraz apetito", que puedas llegar a pensar que comer es pecado, que es algo que está muy muy feo, y que, para ser digna de ser querida, lo ideal sería no comer absolutamente nada... y conseguir que la balanza marcara cero quilos...
jueves, 14 de octubre de 2010
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