jueves, 8 de abril de 2010

¡Esto sí que es una “paja mental”!

Me gustaría aclarar que yo me tomo unas pastillas que están indicadas para personas que “ven cosas que no existen”. Sabiendo eso, estoy segura que alguien se pregunta como he llegado a la conclusión que se me ha manipulado para sacarme dinero, y si eso no podría ser sólo una impresión mía, una idea irreal que me hubiera hecho uniendo unos indicios aislados y que en fondo no significan nada.

Cuando hablas con alguien y ves que como resultado de aquella conversación te has ofrecido a dejarle 5 euros, quizá no tiene motivos para sospechar nada. Pero, cuando ves que la situación se repite, y que siempre que hablas con aquella persona, tu no tienes intención de hacerlo, pero siempre le acabas dejando 5 euros... ¿No es este un motivo más allá de la enfermedad mental para pensar que aquella persona está manipulando la conversación para sacarte el dinero? Y eso que los cinco euros no te lo ha pedido en absoluto, siempre se los has ofrecido tu. Entonces, un día no se los ofreces, y te hace sentir como una bruja: porqué, ¡se trata de una cantidad tan pequeña! ¿Todavía tienes motivos para pensar que el hecho que te manipule para sacarte el dinero son imaginaciones tuyas?

Estoy segura que muchos estáis pensado: no vale la pena perder un amigo por no ser capaz de dejarle cinco euros. Pero estoy segura que todos vosotros tenéis amigos de verdad que os quieren más allá de los cinco euros, y no que les dejáis cinco euros cada vez que os veis. Yo también estoy de acuerdo que si eso pasa sólo una vez no hay motivos para enfadarse ni para sospechar.

Quizá en el segundo caso de que hablo hay más motivos para pensar que la manipulación es una imaginación mía... pero, si ves que estás hablando con alguien, y de repente la conversación te lleva a decir, espontáneamente, “bueno, ¡ya te los dejo yo!”, y tu no tenias intención de dejar nada, sólo estabais hablando. Y la otra persona no te pedido nada directamente. Pero la conversación ya te ha llevado a ofrecerle una pequeña cantidad. Y normalmente eso no te pasa... Gato escaldado... Si eso ya te ha ocurrido antes... ¿no tienes motivos para pensar mal?

No sé, quizá sí, que, como me han dicho todos mis psiquatras, hago caso de indicios irreales a la hora de tratar con mis amistades. Pero ahora no hablo de incidios, hablo de hechos objetivos, hablo de 5 euros que eran míos en manos de otra persona que no me los ha pedido pero que se los mete rápidamente en el bolsillo y yo encantada de la vida y sintiéndome “tan buena persona”. Quizá eso no es una prueba objetiva que esta persona ha manipulado la conversación para que yo le ofreciera dinero... pero el hecho que tiene un dinero que yo no tenía intención de dejarle es un hecho objetivo. ¿Hasta qué punto puedo pensar que eso de la manipulación son imaginaciones mías, que veo cosas que no existen?

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